Cuando hablamos de un buen corte de cabello o de una barba bien definida, no solo se trata de seguir una moda. Aquí entra en juego una técnica que ha revolucionado la forma en que los barberos trabajan: el visagismo.
📖 ¿Cómo empezó el visagismo?
El término “visagismo” viene del francés visage, que significa “rostro”. Fue desarrollado en los años 60 por el estilista francés Claude Juillard, quien buscaba ir más allá de un corte estándar y crear estilos personalizados que resaltaran las facciones y la personalidad de cada persona.
En pocas palabras, el visagismo no busca copiar un estilo de revista, sino crear un look único para cada rostro.
💈 ¿Cómo se aplica en la barbería?
En la barbería, el visagismo se centra en analizar la forma del rostro (ovalado, redondo, cuadrado, triangular, alargado) y a partir de eso:
Elegir el corte de cabello más favorecedor.
Definir el tipo de barba o bigote ideal.
Crear armonía entre facciones, estilo de vida y personalidad del cliente.
El barbero que aplica visagismo no solo corta, asesora y transforma la imagen de manera estratégica.
⭐ Ventajas del visagismo en la barbería
Personalización total: cada cliente recibe un estilo que realmente le queda.
Resalta rasgos positivos: alarga, afina o equilibra visualmente el rostro.
Aumenta la confianza: un corte pensado para ti eleva tu seguridad personal.
Fideliza clientes: quien recibe un servicio así, difícilmente lo cambia por otro.
👉 Este enfoque convierte al barbero en un asesor de imagen especializado, no solo en alguien que corta cabello.